El argumento de la supuesta novela Cómo se hace una novela es la historia de la angustia de un hombre, U. Jugo, provocada por el terrible descubrimiento de la llegada de una inevitable muerte, desatada por la lectura de un libro que profetiza la muerte del lector.
Pero el relato de Jugo se ve constantemente interrumpido por las numerosas digresiones del autor que ocupan mucho más espacio que la historia propiamente novelesca. Cabe advertir at lector que no debe buscar en esta novela una receta técnica de cómo escribir una novela; esto es simplemente una excusa para la auto-introspección.
En vez de receta encontramos asuntos que son obsesiones personales del autor: el pasado, el presente y el futuro de España y las penosas circunstancias políticas que le condujeron al destierro; la eternidad y el tiempo; la inmortalidad; la persona y el personaje; la relación entre novela e historia, ficción y realidad, vida y novela, sustancia y forma. En fin, se trata de un catálogo Unamuniano que envuelve lo literario, filosófico, estético o histórico y político.
Tema importante es lo existencial: el ansia de sobrevivir la muerte por medio del legado intelectual y artístico.
La novela —que más es meditación de obsesiones personales— fue escrita en el destierro en Francia.
En muchos pasajes, el protagonista U. Jugo pasa desapercibido, u opacado por la hostilidad, impaciencia, y hasta amargura del autor ante novedades que le llegan de su patria y que le incomodan, picándole la cresta, o mejor digamos hiriéndole personalmente. Para ilustrar: Unamuno se muestra muy intolerante con la Generación del 27, que, a su criterio, ‘servilmente’ homenajean a Góngora por su III centenario.
Para resumir: me parece que lo que Unamuno hace en esta novela, Cómo se hace una novela, es ahondar lo que Benito Pereza Galdós dijo sucintamente: “Por dondequiera el hombre vaya lleva consigo su novela.”