El inconsciente no es un lugar, es un dispositivo de la mente. Solo conocemos una pequeña parte del todo y esa parte es la que llamamos "nuestra realidad personal".
A partir de la auto-exploración encontramos la sabiduría para tomar las decisiones correctas y logramos ver las circunstancias actuales como oportunidades ilimitadas de crecimiento personal, a partir de esto, podemos trazar nuestro propio destino.
El autoconocimiento nos abre las posibilidades para poder vislumbrar y elegir el "camino rectificado", y para poder ayudar a quienes nos rodean a lograr una existencia más feliz, saludable y abundante.
Cuando Buda dijo: "estoy despierto", quería decir que se había dado cuenta de que ya no participaba en la ilusión, sino que él creaba la ilusión.