47 años tardó María Trusa en romper el silencio y hablar sobre la violación de la que fue víctima con tan sólo ocho años de edad. Ella es la prueba de que alzar la voz libera, dejando atrás el dolor, la crueldad y las secuelas de cualquier tragedia, transformando nuestro destino por completo. Su vida entera es un ejemplo del inmenso poder que tiene el autoconocimiento, el perdón, la disciplina y el creer firmemente en una vida mejor. María fue capaz de revertir por completo su historia, convirtiéndose en una exitosa empresaria, líder comunitaria y activista, que lucha constantemente por erradicar el flagelo de la agresión sexual y todo tipo de abuso en nuestra comunidad. En estas páginas comparte su trayectoria de superación y crecimiento constante, que entre otros logros, la convirtieron en maratonista a los 55 años de edad. Sus aciertos y caídas, sus métodos de aprendizaje y todo lo que la ha llevado a ser una mujer que impacta, deja huella y transforma vidas.